El Pudín de chía es una receta clásica de la cocina vegana. Es simple de preparar, cremoso, ideal como desayuno liviano y súper nutritivo.

Lo enseño en varios de mis cursos, en muchas versiones, porque motiva a probar nuevas opciones entretenidas en base a plantas .

Muchas recetas de Pudín de chía incluyen endulzantes como agave, sucralosa, alulosa, o algunos tipos de azúcar.

En lo personal, evito al máximo endulzar las comidas, e invento recetas dulces con frutas.

Hoy te comparto una de mis versiones preferidas de este pudín, con muy pocos ingredientes, naturales y frescos para disfrutar este verano.

Ir poco a poco incluyendo MÁS plantas en tus comidas y MENOS azúcar, lácteos, frituras y ultraprocesados, te ayudará a sanar tu intestino,ordenar tus hormonas, mejorar tu estado físíco y vivir con más salud.

Prueba esta receta (y todas las que te comparto ☺️) e inclúyela como reemplazo a un desayuno tradicional , o como snack a media tarde, en vez de helados, pasteles, galletas, etc!

¡Espero que lo disfrutes!

1.      Leche de almendras:
 Remoja las almendras en abundante agua filtrada por 12 a 24 horas.
Cuela el agua de remojo y enjuaga bien. 
Lleva a una licuadora las almendras activadas (remojadas) y agua limpia purificada.
Licúa hasta que no queden trozos. Mi licuadora power la encuentras en @solucionessaludables 🌟♥️

Pasa la bebida licuada por un colador o malla filtrante y separa toda la fibra posible.
Puedes refrigerar la leche resultante en un frasco de vidrio por 3 días. 
 2.      Pudín de chía:
 Lleva a un bowl las semillas de chía, agrega bebida vegetal y mezcla bien con una cuchara. Refrigera por 3 a 12 horas. 3.      Salsa frutal:
 Corta un durazno maduro (dulce) y lleva a una licuadora pequeña. Agrega un trocito de jengibre y frutillas. Licúa hasta conseguir una salsa. Refrigera.
 4.      Armado: Divide la mezcla del pudín de chía en 3 porciones y lleva a frascos de vidrio o platos hondos de postre. Cubre cada uno con una porción de sala y decora con trocitos de frutas. También puedes agregar chips de coco o semillas. Mantenlo refrigerado hasta comer (máximo 4 días). ¡A disfrutar!